Me había despertado tarde. No tenía ganas de despojarme de la cama y un cierto "tono pesumbroso de responsabilidad" me había empujado fuera de ella. Rápidamente mi cuerpo entero, luminoso, se había dirigido al ordenador... qué manía contemporánea la de este articulo "doméstico" y el ser actual. No sé bien qué escribir, lamentablemente me cuesta mucho hacerlo aunque desde hace mucho, pero mucho tiempo tenga ganas de decir algo y no lo pueda hacer. Cuando quiero escribir me atasco, me "ennudo" (creación mía?) y me quedo pensando en qué querré decir. De momento hace frío en Madrid y es festivo. Me he levantado tarde y sólo por responsabilidad. Me gusta decir de mí, de lo que hago, de lo que siento, de lo que sueño, de lo que veo, de lo que escucho, de lo que recuerdo (ahora menos que antes es verdad) e igual sigo aquí, sentada escuchando lo que querré decir.
Me gusta soñar que todo irá a mejor
que no hay pesadumbre en mi pecho
ni orfandad
orfandad de niño, orfandad de ciudad
Madrid 2008
no la hay
esquinas abiertas, semáforos rojo-verde
de realidad
significados significantes de los dos
viajeros de pie a caballo en rutas distintas
paralelas
acordes a esta gran ciudad
rocio.
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